Jaque mate
En una jugada que parece sacada del tablero del mismísimo Kasparov, la delegación de Gobierno ha puesto en jaque a la manifestación organizada por Unidad Motera.
Más allá de lo que se pueda leer en los diversos medios digitales españoles, al momento de publicar este post (01:00 AM) La organización no ha desconvocado oficialmente la Manifestación del 8N8. Está a la espera de la respuesta, autorización o denegación oficial, de la Delegación de Gobierno.
Sea como sea, la movilización se verá perjudicada. Si finalmente se hace, y esto se notifica (con muchísima suerte) hoy jueves por la mañana, lo que antes iba a ser una manifestación perfectamente orquestada desde hace meses, se convertirá en una convocatoria apresurada, que perjudicará sobre todo, a los moteros de fuera de Madrid. Por el contrario, si la manifestación se posterga, el invierno mermara de cualquier modo la presencia de los que vivimos alejados de la capital Sea como sea, parece que la organización se vera perjudicada, y esto tiene, según lo veo, ínfimas posibilidades de ser una situación a la que se ha llegado por casualidad.
El desprecio por el colectivo motero, no es algo nuevo ni debe sorprendernos, ayer mismo, el señor Pere Navarro, declaraba que: “Se está focalizando mucho el problema de la seguridad de las motos en los quitamiedos, en lo que habría que centrarse es en que el motorista no se caiga. Si se produce una caída, que el quitamiedos sea uno u otro, la diferencia será de una caída de un décimo o de un quinto piso«.
Con este mismo criterio, digo yo, la imposición del casco es discutible, porque solo protege al motorista en caso de caída. Pero no es mi intención objetar el uso del casco o intentar defender lo indefendible, de esa tarea (digna de hipócritas, caraduras y sinvergüenzas) ya se encarga muy bien el director de la DGT.
No debe sorprendernos entonces, que la DGT no descarte recortes en el plan de instalación de guardarrailes seguros por la crisis , incluso cuando los Presupuestos Generales del Estado para 2009 contemplan que la DGT recaude el año que viene 416 millones de euros en multas y sanciones, o sea un 15,5 por ciento más que en 2008.
Cuidado con los nuevos radares
La DGT instala más radares para tapar el agujero de las arcas públicas
El objetivo de los radares de velocidad en las carreteras no es reducir los siniestros, sino aumentar la recaudación por multas.
Un estudio de Automovilistas Europeos Asociados (AEA) revela que sólo el 26,9% de los radares están situados en puntos negros, frente al 34% de hace un año.
Los conductores vamos a ayudar a pagar el déficit público.
Carlos Menéndez
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